Empieza todo, tal como empiezan los lindos cuentos;
…Érase una vez.. y al final, no todo termina como en los cuentos. En ocasiones la realidad es distinta.
Muchas son las parejas que se enamoran ( o no), se casan ( o no), tienen hijos (o no), los aportan al matrimonio (o no), compran una vivienda a medias con hipoteca, y luego se separan.
Dejando a parte las dificultosas soluciones, pactos y procedimientos de la separación, nos encontramos enganchados con la hipoteca.
[Tweet “Quizás el amor no es hasta el final, pero sí lo es la hipoteca.”]
¿Qué pasa con la hipoteca cuando una pareja se separa?
Los obligados hasta el final al pago de las cuotas de la hipoteca son los que la firmaron.
¿Y si hemos ido al notario para hacer la separación del condominio? ( o sea darle a la otra parte o venderle la mitad de la vivienda)?
Si la vivienda está hipotecada, por mucho que en la notaría le vendas tu mitad a tu ex pareja, la hipoteca sigue estando a tu nombre.
¿Cómo debo hacer para que la hipoteca deje de estar a mi nombre?
Sólo hay una manera de que te libres de la obligación de la hipoteca que firmaste. Debéis acudir al banco junto con tu ex pareja, y pedir que os hagan una modificación del obligado. La entidad financiera, estudiará si los ingresos de la parte que se quede con la vivienda y con la hipoteca son suficientes para asegurar la obligación.
Una vez hayan aprobado la operación a nombre de tu ex pareja, entonces debéis ir al notario para hacer la separación del condominio y la modificación de la hipoteca.
¿Qué pasa si no hacemos el trámite del banco y le vendo a mi ex pareja mi mitad de la vivienda?
Esto sin duda es lo peor que puedes hacer. La vivienda irá a nombre de tu ex pareja, y si deja de pagar la hipoteca, te la van a reclamar a ti, aunque no seas propietaria de la misma, y aunque no vivas en ella.
Puedes verte en una ejecución , mediante subasta de la vivienda, y si el dinero que se saque no es suficiente para cubrir la deuda, la entidad financiera, puede perseguir tus bienes presentes y futuros, o ir directamente a embargarte la nómina o la cuenta bancaria.
Tener una vivienda hipotecada a medias con tu ex pareja no es demasiado buen asunto, y tener una hipoteca sin tener la vivienda, ni vivir en ella, es peor que lo primero, por lo que mal que mal, si no puedes sacarte la hipoteca de encima, lo mejor es que tengas parte de esa propiedad.
No hay trucos mágicos para librarte de la hipoteca sin pasar por la entidad financiera, por lo que debes tener esto muy claro antes de embarcarte en una hipoteca a medias con alguien.
Si tienes alguna duda, puedes escribirla en los comentarios y te asesoraré.
Te agradeceré que quieras compartir este post, pues es IMPORTANTÍSIMO, que los jóvenes y no tan jóvenes tengan esta información cuando antes.
Tengo un amigo que se ha separado. Tiene una hipoteca a medias con su ex-pareja. En la casa vive su ex-pareja con los dos hijos que tienen en común, ambos mayores de edad. Según la sentencia de divorcio están obligados a pagar entre ambos la hipoteca. Sin embargo, su expareja tiene problemas económicos y no está pagando su parte. La opción de vender la casa no es factible pues el importe de la hipoteca es mayor que lo que les darían ahora mismo por la casa. Tampoco la dación en pago es factible. Él hasta ahora se está haciendo cargo del total de la hipoteca, cuando su expareja no paga, pero ahora ha cambiado su situación laboral y han disminuido sus ingresos, de manera que no podrá afrontar el pago de toda la hipoteca y pagar además un alquiler, así que ha pasado a pagar sólo su parte, pero teme que le puedan embargar su sueldo para pagar la parte que no paga su expareja o que les puedan quitar la casa si su pareja continúa sin pagar. ¿Es así? ¿Existe alguna posibilidad de que él se quede con la casa y pague toda la hipoteca al ser los hijos mayores de edad? ¿Dónde podría consultar todo esto? ¿Cómo podría conseguir asesoramiento financiero? ¿Necesita un abogado?
Apreciada Elena,
Por desgracia, parece que tus amigos están en un verdadero dilema. Lo mejor es que vayan a hablar con el banco, y les pidan una carencia, una quita o negocien un plazo más largo, para que las cuotas mensuales puedan verse reducidas.
De todas maneras no es un asunto para tomarnos a la ligera, por lo que te recomiendo que se pongan en manos de algún asesor experto en finanzas personales, y les entreguen la documentación relativa a la hipoteca y todos sus gastos personales e ingresos, para que éste pueda hacerles un estudio personalizado para su caso en concreto.
Un abrazo.
Marta